-É bastante intenso, quer
praticado neste próprio local, quer procurado noutras paragens; esta gente trabalhadora, é também votada ao divertimento e
ao «bom viver».
Lazer
Publicite
-Sendo as férias uma preciosidade
rara, só ao alcance de uns poucos,não obstante o seu merecimento, é aos «Fins-de
semana», que se torna mais acentuado, procurando essencialmente piscinas e rios, essencialmente no período de verão.
Escrito Em Castelhano porque foi no Bairro de Madrid(Santa Eugenia)
que soube a origem do topónimo. É uma homenagem!! EUGENIA
EugeneioV, eugeneia
(eugéneios, eugéneia) es un adjetivo griego del que derivan los
nombres de Eugenio y Eugenia, y significa bien nacido, bien nacida, de buen linaje, de buena índole, noble. Fue en griego
y sigue siendo en sus traducciones, uno de los mejores elogios que se suelen hacer de una persona. Con él se expresan las
cualidades innatas, las que forman parte de la naturaleza de cada uno, aquellas con las que ha nacido. El prefijo eu (eu) significa
"bien", y geneioV (géneios) geneia
(géneia) significa "engendrado, engendrada"; con
lo que el significado primitivo de este nombre es "bien engendrada". Se utilizó mucho, no sólo en el griego clásico, sino
también en la coiné como sobrenombre elogioso, designando especialmente la nobleza de espíritu, y de ahí pasó a convertirse
en nombre propio cuya fuerza y belleza seduce a cuantos conocen su significado.
Santa Eugenia mártir de los primeros tiempos de la Iglesia. Su culto estuvo muy extendido desde los primeros siglos. La patrística
cita el dístico que desde el siglo IV figuraba en la iglesia de san Avito: Eugeniae dudum toto celebérrima mundo / fama
fuit, dum dat Christi pro nómine vita. (La fama de Eugenia fue célebre en todo el mundo porque dio la vida por el nombre
de Cristo.) Con ser tan grande su celebridad, son escasos los datos biográficos que de ella se conservan. Cuenta la tradición
que era Eugenia hija de Felipe, el prefecto de Alejandría que luego fue obispo de esta ciudad y sufrió el martirio. Cuenta
asimismo que los santos Proto y Jacinto, que también sufrieron martirio, eran esclavos suyos. Fue ella misma quien les transmitió
la fe en Cristo. También ella sufrió persecución y fue sometida a suplicio y muerte detrás de sus esclavos.
Las Eugenias celebran su onomástica el 11 de septiembre; pueden optar también por celebrarla el 3 de enero,
en que se conmemora el martirio de santa Eugenia de África; o el 26 de marzo, conmemoración del martirio de santa Eugenia
de Córdoba (Marmolejo), víctima de la persecución sarracena el año 923. En cuanto a la forma masculina de este nombre, ha
sido también sumamente apreciada: dieciocho santos, entre ellos cuatro papas, lo llevaron. Se llamaron también Eugenio un
emperador romano, siete reyes de Escocia y varios príncipes de casas europeas. Pero nadie como la emperatriz Eugenia dio lustre
a este nombre. Nació en Granada (1826) y murió en Madrid en 1920. Vivió casi un siglo. Fue emperatriz de los franceses. Su
apoyo al proyecto del canal de Suez fue decisivo.
Es el de Eugenia un nombre lleno de fuerza, que emana de su propio significado. Los nombres, como creían nuestros
antepasados, tienen cada uno su propia virtud, y actúan como un talismán. El de Eugenia sabemos en qué dirección actúa: empuja
a quienes lo llevan a ser coherentes con su nombre y a cultivar la nobleza de espíritu, la magnanimidad, la confianza en las
propias fuerzas y toda la virtud que emana del mismo nombre; fuerza y virtud que han ido incrementando cada una de las grandes
mujeres que lo han llevado. Por ello las Eugenias pueden legítimamente sentirse orgullosas de su nombre y llevarlo como salvaguarda
de la nobleza de espíritu que con él pregonan. ¡Felicidades!
Diz-se , que «Santa Barbara», Padroeira desta
freguesia, costumava ser,injusta, brutalmente, e, mesmo «brutamente», castigada
por seu pai; de tal forma que uma certa vez, ele sedirigiu para a filha, como determinado propósito de a partir ao meio com um «machado». Deus, acudindo em defesa
de StªBarbara, no momento preciso em que o pai de «Barbara», ia a desferir o mortal golpe, enviou um raio de trovão.«Barbara,
apercebendo-se do acontecido, pediu a Deus que lhe perdoasse. Então, o raio, apenas desfez o machado em mil pedaços, poupando
o «carrasco».A partir daí, «Barbara», passou a santa, e, foi-lhe facultado o poder sobre as trovoadas. Devido a tal facto,
as gentes deste local, entregaram o seu coração a «Eugénia», dando-lhe o nome da sua morada; a sua protecção, a «Barbara»,
que segundo eles, ainda hoje os vigia e protege do alto do monte com o seu nome (Cabeço de Santa Barbara).